Nunca tuve la oportunidad de jugar a Bayonetta en su momento y he aprovechado su lanzamiento en Steam para quitarme esa espinita. Todo lo que tengo que decir sobre este juego son bondades. Lejos del apartado gráfico que puedes esperar de un juego de hace 8 años, el juego se conserva en plena forma y es perfectamente disfrutable a día de hoy.

El punto realmente poderoso en este título es sin duda su jugabilidad, no se puede esperar menos de Platinum Games (Metal Gear Rising, Vanquish o Nier: Autómata) entre otros. La precisión y suavidad de movimientos hacen las delicias del jugador, que puede sumergirse en la acción sin trabas de ningún tipo. Una experiencia todavía puntera en el género después de tantos años.

Pero si hablamos de sumergirnos en el juego no podemos pasar por alto al gran personaje que sostiene todo el conjunto. Bayonetta es una magistral muestra de carisma en estado puro, Hideki Kamiya (Director) se gana aún más si cabe mis respetos después de haber descubierto a esta musa del inframundo. Sin duda no te dejará indiferente.

El juego tiene un tempo a mi entender perfecto, ni muy largo ni muy corto, te ofrece la dosis justa de desafío, como para querer repetir subiendo de dificultad nada más terminarlo. Porque además terminarás siendo una auténtica máquina de hacer combos imposibles. La curva de aprendizaje en este sentido es impecable.

La trama no es lo más importante en este género, pero igualmente te mantiene atento debido al misterio con el que la presentan. Te la irán desvelando en pequeñas dosis, en forma de textos o escenas de vídeo muy apañadas (hay escenas de combates realmente épicas) y al final del juego, te quedará una gran sonrisa de satisfacción en la cara, eso te lo garantizo.

Sin ser yo gran aficionado desde nunca de la estrategia por turnos de este calado, de profundidad abrumadora, gestión de recursos milimétrica y estudio casi enfermizo de sus numerologías, combinaciones y sinergias, puedo decir que Civilization VI te deja entrar en su mundo con la manga ancha del que se sabe virtuoso y experimentado en la materia.

No siendo para nada sencillo de dominar, lo nuevo de Firaxis se hace realmente accesible para "iniciados" que quieran adentrarse en el género. No te agobia con demasiadas cosas, va directo al grano desde el principio y te lo pone muy fácil para querer seguir "solo un turno más". Se hace adictivo precisamente por esto, sus primeros turnos son espectaculares y cada partida será diferente a la anterior. Reiniciarás varias de ellas solo por el gusto de comenzar de nuevo, de descubrir qué pormenores tendrá que afrontar esta vez tu civilización.

Sin embargo y en mi caso, en torno al final de la partida, todo se hace un sin sentido demasiado prolongado. Si cultivas bien las amistades no habrá miedo de guerras declaradas por sorpresa -por mucho que los líderes (IA) sean bipolares histéricos. Te darán una de cal y otra de arena sin fundamento alguno- y la victoria será relativamente sencilla de conseguir si has gestionado medianamente bien tus turnos.

El aspecto visual es algo que ha levantado algunos debates. El rollo cartoon no gustará a todo el mundo, por eso de la fidelidad y del realismo, pero en lo personal es algo que me ha encantado. Todo parece un pequeño tablero de Risk, con sus detalladas figuritas de exposición para observar tranquilamente.

Por último la mejor parte de todas, la música. Sublime mezcla de composiciones que variarán dependiendo de la civilización escogida e incluso de la época en la que te encuentres. Todo un acierto y una delicia para los sentidos es sin duda la banda sonora que no está presente, que no se aprecia hasta que te das cuenta que llevas sumido en sus melodías varias horas sin darte cuenta.

Sin duda recomiendo Civilization VI al 100% a cualquiera que haya disfrutado alguna vez de Xcom, Divinity Original Sin o similares. A poco que te sientas atraído por el género, este es tu juego.

Nunca había probado un Diablo y me ha sorprendido muy gratamente. Su nivel artístico, su lore, su música o su profunda jugabilidad, lo hacen un juego casi perfecto. Lo único malo es que con mi GTX970 hay un stuttering importante y habrá gente que no sepa solucionarlo. (Para arreglarlo, activar en opciones el apaisado, la sincronización vertical y limitar los FPS principales a 60)

Nunca había probado un Diablo y me ha sorprendido muy gratamente. Su nivel artístico, su lore, su música o su profunda jugabilidad, lo hacen un juego casi perfecto. Lo único malo es que con mi GTX970 hay un stuttering importante y habrá gente que no sepa solucionarlo. (Para arreglarlo, activar en opciones el apaisado, la sincronización vertical y limitar los FPS principales a 60)

Un verdadero shooter como los de antes, gráficamente muy potente y con una historieta bastante apañada para el tipo de juego que es. Wolfenstein es una delicia jugable y visual, lo recomiendo totalmente.

Hearthstone es adictivo y gratuito, que más se puede pedir?. En este juego sí pagas a gusto por los extras y las expansiones, Blizzard lo merece en este caso. Lo recomiendo a todo el mundo sin lugar a dudas.